Año de publicación: 2022

Una propuesta local para grandes generadores RSU partido de Lomas de Zamora como modelo de gestión, provincia de Buenos Aires

Resumen

El Costo Social de la Gestión de Residuos Sólidos Urbanos La generación de RSU es costosa para la sociedad, sea nacional, provincial o municipal. Este costo no es, solamente el costo en que incurre el Municipio por trasladar y disponer de los RSU, ni el que incurre el gran generador, por medio de un contrato privado, para las mismas acciones. Se refiere a un concepto más abarcador: el costo económico o societal. El costo económico o societal total es el costo que la sociedad en su conjunto (en este caso, la sociedad municipal) paga por generar, transportar y disponer de sus RSU, independientemente de quién lo pague. Se compone de los costos que pagan los actores privados (en este caso, los grandes generadores, la Municipalidad, CEAMSE) y los costos que paga la sociedad en su conjunto (normalmente, de manera indirecta). Estos últimos costos pertenecen a tres grupos diferentes:

Las externalidades, es decir, los efectos que no se transforman en una erogación financiera (visible) pero que afectan el bienestar de la sociedad. Por ejemplo, la contaminación del aire por una quema no controlada, o el deterioro de las calles por donde pasan los camiones recolectores.

Las transferencias, por ejemplo los impuestos: para la empresa es un costo, para el Estado, un ingreso. En el conjunto de la sociedad no hay efecto económico (si se trata de impuestos no distorsivos).

Los costos que el mercado valúa de manera incorrecta, debido a alguna distorsión. Por ejemplo, la empresa computa como costo de mano de obra tanto el salario como las cargas sociales; éstas son un costo societal en tanto el trabajador las considere como la retribución de un servicio, ya que valora el servicio de la obra social. Si no lo valorara, sería una especie de impuesto, y por lo tanto una transferencia. La identificación y cuantificación del costo societal de la gestión de los RSU es relevante a los efectos del diseño de una política que optimice la misma.

En efecto, la pregunta crítica es ¿cuánto le cuesta a la sociedad del Municipio cada tonelada de RSU generada y enviada a disposición final? Sin ese dato, el costo financiero que el Municipio paga, o que impone al gran generador, puede estar muy desalineado con el costo económico – el verdadero costo – y por lo tanto no se estaría dando la señal económica adecuada. Así, es posible que los grandes generadores encuentren barato producir RSU, si el costo financiero que pagan es menor que el costo económico de esa generación.

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